Asegura que el grupo que comanda Miguel Villalba tendrá una propuesta integral y que las representaciones (El joven manos de tijera y Pistola Marsicano) requerirán componer múltiples personajes. Y si bien las parodias biográficas no son su estilo preferido, la de Pistola Marsicano tiene dos características que la pueden convertir en una gran historia.
Foto: Jimena del Río Ocampo
Antes de subirse a un tablado como componente, Claudio Melcón fue «músico mascota» de Los Joker´s y Los Tamberitos, una denominación válida para aquellos niños que, provenientes de familias carnavaleras como la suya, recorrían los tablados actuando en los intervalos o subiéndose a bailar un fragmento de la despedida
Pero el tiempo fue pasando y el artista comenzó a forjar un nombre en una categoría en la que es difícil desbancar a los actores más consolidados.
El 2017 será un año clave para Claudio, ya que tendrá responsabilidades en la faceta de actuación, tal vez como nunca antes.
Para ello buscará brindarse por completo y dar «un toque personal» a todos los personajes que le asignen, según expresó en conversación con Calle Febrero.
Con Nazarenos interpretará las obras El joven manos de tijera y Pistola Marsicano, dos parodias que recorren texturas distintas: una fantasía y otra de corte biográfico.
Claudio dijo que imagina «un espectáculo integral con mucho colorido, más teniendo en cuenta que las historias de fantasía le caen como anillo al dedo a Nazarenos».
A su juicio, la elección de tales representaciones y la cantidad de personajes que requerirá su narración necesitará «el desdoble de los actores, por lo que el trabajo será un lindo desafío», sentenció.
Y si bien su gusto no se inclina por las parodias biográficas, la de Marsicano tiene dos condimentos esenciales que permiten una excepción a la regla: «es un personaje nacional y cercano al carnaval (de modo que) puede ser una buena historia a contar», puntualizó el actor del elenco que comanda Miguel Villalba
También aseguró que el el despliegue de canto y baile será otra vez un sello de estilo de la propuesta.
«SIN CAMBIOS RADICALES»
Claudio va camino a cumplir 30 años de su debut en carnaval, aunque no estuvo presente en todas las temporadas.
Salió en Los Charoles (1988), Los Walker´s (1989), nuevamente Los Charoles (1990 a 1995), Milenio (2001), Nazarenos (2002 al 2006, 2009 y 2012), Zíngaros (2010) y Momosapiens (2014 y 2015).
Esa amplia trayectoria le permite tener una lectura integral de la actualidad del parodismo.
«Creo que la categoría mantiene las mismas características desde hace muchos años y no hay cabida para propuestas nuevas. La competencia es claramente por rubros y es necesario apostar por algunos de ellos para acercarse a la cima», dijo Claudio y puso como ejemplo el no ingreso de Aristophanes a la liguilla, teniendo la mejor parodia.
Consultado sobre el devenir de un género que sigue siendo uno de los preferidos del público, el actor de Nazarenos entiende que «no habrán cambios radicales a futuro en el parodismo, aunque esto no quita que siga siendo una categoría atractiva, taquillera y con definiciones apasionantes».