Curtidores de Hongos llegó al Teatro de Verano con el espectáculo “Perdida Mente”, en el que plasmó su anunciada renovación de plantilla y elenco.
En diálogo con Calle Febrero, Gonzalo Palau, libretista y componente del grupo dijo que la actuación del pasado martes “se disfrutó mucho”, a pesar de la ansiedad acumulada luego de dos suspensiones por mal tiempo.
Gonzalo dijo que Curtidores pudo superar lo hecho en la prueba de admisión canalizando los temas buscados de un modo adecuado.
Su llegada a la murga se complementa con la de Rodrigo Gullenea, su socio artístico en la murga Zarto Disparate, que viene teniendo actuaciones destacadas en el Encuentro de Murga Joven.
“La idea era ponerle juventud a una murga que apuesta por un estilo tradicional y esa mixtura se logró”; dijo el artista.
Añadió que en los tablados vienen cosechando una buena respuesta en términos humorísticos, mayor aún a la obtenida en la primera rueda del Teatro de Verano.
De cara a la segunda rueda, el grupo buscará estar un poco “más suelto”, con la finalidad de que rindan más los pasajes donde la murga hace su apuesta por el humor, como en el cuplé de Uber.
El artista de Curtidores de Hongos dijo también que, a su juicio, el coro cantó en muy buena forma y que existe confianza en que los pasajes de crítica -que ocupan espacios destacados dentro de la propuesta- vuelvan a tener la receptividad lograda en el primer pasaje por el Collazo.