El elenco comandado por Leonardo Pacella, Ariel Sosa y Fabricio Speranza satirizará la mayor gesta del pueblo oriental. La segunda aún está por resolverse.
Foto: Jimena del Río Ocampo
La Redota, como se conoce popularmente al Éxodo del pueblo Oriental, de 1811, será parodiada por Zíngaros en el Carnaval 2018, informó a Calle Febrero el director responsable del grupo, Ariel «Pinocho» Sosa.
Los libretos de la obra estarán a cargo de Fabricio Speranza, quien comandará el elenco junto a Leonardo Pacella, Ariel Sosa, Ledys Araújo y Cristian Amacoria.
El Éxodo de 1811 es la mayor gesta en la historia del pueblo Oriental.
Ocurrió en octubre de 1811 luego del armisticio firmado entre el entonces virrey Francisco Javier de Elío y la Junta de Buenos Aires, que determinó el levantamiento del Sitio de Montevideo, liderado por José Gervasio Artigas, en plena sublevación de la Banda Oriental.
El ejercito español se replegó en su último bastión, Montevideo, hasta que el 20 de octubre la Junta de Buenos Aires decidió sellar el trato con los españoles.
Artigas, traicionado, comandó la marcha de más 500 kilómetros y 60 días de duración, que tuvo más de 3.000 soldados y a la que se fueron plegando numerosas familias que, en actitud heroica, acompañaron al líder de los Orientales en distintos campametos, hasta el Ayuí, próximo a la actual ciudad de Concordia.
Según trascendió, Artigas será interpretado por Leonardo Pacella en el elenco de los parodistas gitanos.
EL ÉXODO Y SU ANTECEDENTE EN CARNAVAL
Él Éxodo, además de su enorme valor simbólico en la historia nacional, tiene un antecedente imborrable en el carnaval de 1984, cuando Falta y Resto lo recodró en su despedida.
En ese carnaval, mientras la dictadura daba sus últimos coletazos, Falta y Resto decidió homenajear a la mayor gesta del pueblo Oriental, su «orgullo y epopeya», como la definió Raúl Castro en el texto de aquella despedida.
En una reciente entrevista concedida a Calle Febrero, Raúl contó que los militares «pidieron» a Falta y Resto que retirara aquella canción que despertava fervor en los distintos tablados, a lo que la murga se negó rotundamente.
Un segundo pedido de los censores fue para que cambiaran de lugar aquel fragmento, contó Raúl, quien fue citado a declarar una noche antes de la actuación de la segunda rueda en el Teatro de Verano.
«Mire comisario, la retirada la vamos a cantar donde va», respondió el máximo referente de Falta y Resto a las autoridades.
«Que nos pidieran que la cambiaramos de lugar era la señal más clara que la dictadura se caía a pedazos», añadió Raúl.
Previo a la declaración de Tintabrava ante los militares, el grupo, en pleno, había avisado a José Germán Araújo, en los estudios de CX30, que la murga y sus directores responsables estaban sufierndo amenazas, en la previa a su segunda actuación por el Collazo.
Repase la despedida Al Ayuí, de Falta y Resto