Los libretos serán de Eduardo Mega, Emilio Castro y Andrés Toro, quien también realizará los arreglos. Desarrollarán una propuesta más colectiva que nunca, con un fuerte bloque de crítica política en el centro. Estará presente la mirada crítica hacia el carnaval, al tiempo que rematarán con un cuplé sobre los distintos modos de acoso.
Por Guzmán Ramos
Foto: Po Colectivo Producor (Maicor Borges y Fernando Vidal)
«Murga, Fiesta y Carnaval» será el espectáculo de La Gran Muñeca, informó a Calle Febrero el director musical y letrista del grupo, Andrés Toro, en un alto del ensayo del grupo, en el club La Isla.
La murga ganadora del 2016, que logró convertirse en una de las favoritas de los espectadores en base a textos humorísticos y una mirada crítica y a la vez esperanzadora acerca de nuestra realidad, profundizará dicha mirada en sus libretos, aunque partiendo de la base de un modo creación más colectivo, dijo Andrés, tomando en cuenta la anunciada ausencia de Fabricio Speranza.
«Trabajamos con mucha alegría y, a la vez, con un modo de creación más colectivo y grupal», sostuvo el artista, tras añadir que este año se incorporó Emilio Castro a un plantel técnico que también integran Eduardo Mega y él, aunque «absorviendo ideas de todos los compañeros, tanto en los textos como en la selección musical», puntualizó.
La Gran Muñeca tendrá tres bloques centrales.
Como de costumbre, el inicial trazará una mirada hacia la interna de carnaval.
Allí se deplegarán sus primeros dardos críticos, jugando con la ironía como disparador.
Este año, la lectura ácida de la murga propondrá la creación de un gremio de murguistas.
La idea, que en el plano de la realidad viene sobrevolando desde hace años pero sin concretarse, rozará aspectos estructurales relativos a la actualidad y modos de organización del carnaval, aunque con una salida jocosa, una vez que La Muñeca decida formar su propio barrio cooperativo de murguistas, ante la imposibilidad de crear su propio gremio.
El segundo bloque correrá el eje hacia la crítica política, con una rendición de cuentas sobre el tablado.
En este cuplé, los políticos del gobierno y el Frente Amplio serán llamados a dar explicaciones sobre la gestión, constituyendo un pasaje de humor y mucha carnatura con los principales sucesos del año.
Como de costumbre, la murga ganadora de los certámenes de 1931, 1992, 1996 y 2016 entremezclará crítica política puntual, con una mirada más amplia..
Es que, además de la sátira a los personajes del dia a día, el foco estará puesto en lo conceptual y no partidario: habrá garrotazos para la ley de riego, los que atacan el medio ambiente, los asuntos relacionados con la previsión social y los militares, entre otros temas, adelantó Andrés, tras comentar que la mirada estará jugada al humor, porque a partir de él «el público queda bien predispuesto y receptivo a otras ideas», puntualizó.
Sugestivamente, los personajes políticos, muchos de los cuales son oficialistas, estarán representados visualmente como grandes títeres en escena.
El tercer bloque correrá otra vez el eje.
El tema será los distintos modos de acoso: el callejero, el laboral y el del Estado, añadió el creativo de La Gran Muñeca.
Andrés también señaló que, a nivel coral y musical, el grupo incorporó a tres voces «clase a» del carnaval, dijo, en alusión a Nicolás Grandal, Fernando Laforia y Marcelo Pallarés.
En el plano coral, la murga del club La Isla apostará «por la simplicidad y coherencia estética, sin ostentación, buscando que todos los arreglos estén subordinados a las necesidades del libreto», expresó Andrés.