La murga Cayó la Cabra deberá dar prueba de admisión para el carnaval 2022, a pesar de haber ingresado a la liguilla del carnaval 2020, por haber cambiado la dirección responsable de Lucas Pintos a Virginia Gervasio, dijeron a Calle Febrero fuentes de la Intendencia de Montevideo y confirmaron los representantes del grupo.
Así lo establece una disposición contenida en el Reglamento General del Carnaval.
«El cambio de dirección responsable no es una decisión que tenga un efecto hacia el interior de la murga, ya que Cayó la Cabra es una cooperativa (de modo que) la dirección se ejerce colectivamente», explicó a Calle Febrero el representante del grupo, Emiliano Belmudes.
No obstante, el artista dijo que la asignación de Virginia como nueva directora, «un trámite que no compartimos, pero que es necesario para participar en carnaval», obedece a que la artista es la de mayor antigüedad en el grupo, indicó.
El cambio de dirección ya fue registrado ante la dirección de Festejos y Espectáculos de la Intendencia de Montevideo días atrás.
Resta formalizarlo ante Daecpu, trámite que se realizará una vez que la gremial de directores habilite nuevamente la atención de su Secretaría.
Emiliano dijo, no obstante, que Daecpu ya está en conocimiento del asunto.
LA GRILLA DE PARTIDA DEL CARNAVAL 2020
Como todos los años, los liguilleros del último carnaval tienen asegurada su participación en el siguiente certamen.
Por tal motivo a Cayó la Cabra le correspondría su cupo para el 2022.
Sin embargo, la murga no completó el trámite de inscripción para el carnaval 2021, circunstancia que determina un presunto vacío reglamentario, que deberán resolver la comuna y Daecpu.
Si bien el sentido común indica que el carnaval 2021 debería saltearse completamente y por lo tanto tomar la última liguilla como punto de partida, el tema aún no fue saldado por las autoridades.
En la misma situación están Nazarenos y Agarrate Catalina, liguilleros del 2020, que no formalizaron su inscripción al 2021, pero que se espera estén clasificados automáticamente, sin necesidad de dar prueba.