Tronar de Tambores pasó por el Teatro de Verano en su ronda liguillera y finalizada la misma Gustavo Gabriel Arrúa dialogó con Calle Febrero.
Foto: Po Colectivo Productor
(Maicor Borges y Fernando Vidal)
«Estuvo bravo el calor pero eso ni nada impide la felicidad que tenemos ahora», fueron las primeras palabras del polifuncional «Chinito» Arrúa, en referencia a las altas temperaturas que dominaron la noche del lunes 28 de febrero en el «Ramón Collazo».La categoría Sociedad de Negros y Lubolos pasa por un gran año y Tronar no es la excepción, dijo el artista de Tronar de Tambores en conversación con Calle Febrero.
«Por suerte se nos dio un excelente espectáculo», añadió Gabriel, tras comentar que el el espectáculo fue mejorando con el correr de las instancias y sus competidores «lo saben», consignó.
El artista también es consciente que las ruedas tuvieron un rendimiento distinto.
«En la primera tuvimos problemas en el sonido, pero en la segunda lo afirmamos y hoy fue el broche», expresó el artista. Añadió que el milongón es el momento más alto del espectáculo, donde Arrúa se siente «muy cómodo» por los compañeros con los que que le toca compartir el momento como gramillero.
Tronar de Tambores cuenta con artistas de la talla de Lilián Rodríguez.
Sin embargo, la solista se sintió mal al llegar y no pudo subir, pero fue suplantada por Sergio Pérez, quién se encargó de cantar su tema. A juicio de Gabriel, ese momento fue «impresionante», puntualizó.
El artista se tiene fe para la noche de fallos, en función de los quilates de una propuesta que viene siendo trabajada al detalle desde hace meses.
Según Gabriel, el trabajo de la comparsa se basa en la figura de Julio «Kanela» Sosa, un «ícono del candombe», que «vive para el espectáculo», finalizó.